El Ejército sudanés afirmó hoy que ha repelido y causado importantes bajas en las filas del grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) durante un ataque de éste contra una importante región del norte del país, una zona ajena a las operaciones militares desde el inicio de la guerra el pasado abril.
«Una fuerza de la milicia de las FAR se infiltró hacia el sureste de la zona de Naqaa y Musawarat, en la frontera de Jartum con el estado del Nilo, en el norte del país», dijo un comunicado del Ejército.
En esa región se ubica la estratégica ciudad de Shendi, un importante punto de cruce hacia el norte del país, así como la zona histórica de Meroe, a unos 150 kilómetros de Jartum y que alberga importantes monumentos de la civilización nubia de Kush.
«Los vehículos de combate de la milicia rebelde (…) fueron atacados por aviones militares, lo que provocó pérdidas (humanas) y heridos», dijo el comunicado.
Afirmó también que «los vehículos restantes se dirigieron hacia el sur, hacia la Montaña Azul y la zona Al Hafira, y también fueron atacados por artillería y desde el aire, causando pérdidas humanas (entre los atacantes) y de vehículos y equipos militares».
«Posible primer encuentro»
Las FAR no ha comentado ese enfrentamiento, que de confirmarse sería el primer intento de los paramilitares de atacar el norte del país después de que registraran en diciembre su mayor victoria al expulsar al Ejército de la ciudad de Wad Madani, en el este de Sudán y que ha servido como refugio para decenas de miles de civiles.
El conflicto, desatado el 15 de abril, ha dejado ya alrededor de 12.000 muertos y siete millones de refugiados y desplazados.
Durante esa guerra, los paramilitares, antiguos aliados del Ejército, se han hecho con el control de distintos distritos de Jartum, la vecina ciudad de Um Durman, así como amplias zonas de la región occidental de Darfur.
Notiespartano/EFE