Desde Deusto Salud aseguran que «la alegría aumenta las defensas y, además, ayuda a conciliar el sueño de forma más rápida ya tener descansos reparadores».
De hecho, la alegría tiene múltiples beneficios para la salud y, a nivel hormonal, atenúa el estrés y la ansiedad. «También hace que tengamos una mayor autoestima y fortaleza, porque potencia los pensamientos positivos», añaden.
Para aumentar el bienestar y por tanto, ser más alegre y saludable, es necesario aumentar los niveles de unas hormonas determinadas. En primer lugar, de la serotonina, también conocida como la «hormona de la felicidad», ya que, en situaciones de ausencia o bajo nivel de esta sustancia, se relacionan con la depresión, reseñó Europa Press.
«Tiene un papel muy relevante en cuanto a las emociones, el estado de ánimo, la regulación del peso, la conducta sexual, el aprendizaje, la memoria y los ciclos del sueño, entre otros», señalan desde Deusto Salud. Algunos de los hábitos que permiten generar serotonina son: hábitos de sueño saludable, actividad física, práctica de meditación y el consumo de alimentos como huevos, plátanos, frutos secos, brócoli, espinaca, cacao y chía.
Elementos que influyen
En segundo lugar, destaca la importancia de la dopamina, habitualmente llamada la «hormona del placer». Tal y como explican, algunas de las funciones de la dopamina son la recompensa, es decir, la sensación positiva al lograr un objetivo, el sueño, el humor, la atención, el aprendizaje y el movimiento, entre otras. Para poder aumentar sus niveles, es necesario el ejercicio físico, el mindfulness, la realización de actividades que conlleven emociones fuertes y además, el consumo de cúrcuma y magnesio.
En tercer lugar, resaltan la endorfina, que es una sustancia que el cuerpo emana para aliviar el dolor y dar un estado de bienestar. Cuando el nivel de endorfina es alto, «disminuye la ansiedad, mejora el humor, retrasa el envejecimiento, potencian la función inmunitaria y reducen la presión sanguínea», explican fuentes de Deusto Salud.
Entre las actividades que aumentan sus niveles, se encuentran la danza, la música, el sexo, comer chocolate amargo (con más de 70% de cacao) y la acupuntura.
Finalmente, la oxitocina es un péptido que, además de relacionarse con la maternidad, está íntimamente ligado a otras funciones que hacen que se le conozca popularmente como «la hormona del amor».
Para estimularla, Deusto Salud recomienda «cenar con amigos, ver o conversar con la madre, pasar tiempo con hijos, los abrazos, acariciar a la mascota o recibir masajes». También se ha visto que la actividad física, practicar yoga y escuchar música pueden incrementarla.
Notiespartano/ElUniversal