Los primeros tres episodios del documental sobre la vida de los duques de Sussex, Enrique y Meghan, fueron emitidos este jueves por la plataforma Netflix, en los que la pareja cuenta cómo se conoció y critica la fuerte intromisión de la prensa.
En el programa, titulado «Harry y Meghan», el príncipe Enrique revela que decidió sacrificar «todo» para unirse al mundo de la ex actriz estadounidense y que, a su vez, su mujer abandonó la libertad que disfrutaba para «unirse a mi mundo».
A pesar de la gran cantidad de fotos y distintas imágenes de ellos y de la familia real que aparecen en este documental, no se revela nada relevante para incomodar de momento a la realeza, si bien los medios esperan con interés la próxima entrega el día 15.
El príncipe Enrique, hijo menor del rey Carlos III, y Meghan decidieron a principios de 2020 separarse de la Casa Real británica para iniciar una nueva vida en California (EEUU), y ser financieramente independientes de la monarquía británica.
Tras esta separación, la pareja llegó a acusar a la familia real de racismo ya que ella es mestiza.
En los tres capítulos emitidos hoy, hay imágenes de sus encuentros secretos antes de que saliera a la luz su relación en 2016, así como fotografías y vídeos de la fallecida Diana de Gales cuando la familia iba a esquiar o estaba de vacaciones a la playa.
También hay imágenes de su hijo Archie, de 3 años, cuando empezaba a caminar y las vacaciones que Enrique y Meghan pasaron en África en 2016.
En el primer capítulo, Enrique explica las obligaciones que tiene la familia real y las presiones que ello implica.
«Esto es deber y servicio, y yo siento que ser parte de esta familia es mi deber destapar la explotación y el soborno que hay en los medios. Mi trabajo es mantener a la familia segura», dice Enrique, que también afirma el alcance del «odio» del que Meghan y su hijo han sido víctimas.
En esta primera parte, el documental se centra en la relación entre ellos, que califica de «historia de amor».
«Esta mujer es increíble. Está tan relajada conmigo. Ella es todo lo que buscaba en una mujer», admite Enrique.
Al referirse a las mujeres que entran en la familia real, el príncipe resalta que, para los hombres, «puede haber una tentación o un impulso a casarse con alguien que encaje en el molde (por la monarquía), en vez de alguien que tal vez esté destinado a estar contigo. La diferencia entre las decisiones que se hacen con la cabeza o con el corazón».
Enrique y Meghan reconocen que decidieron apartarse de la Casa Real después de ser víctimas de unas connotaciones racistas en la cobertura que hicieron los tabloides sobre su relación.
Asimismo, el príncipe Enrique señala que el problema para su familia fue el hecho de que la ahora duquesa de Sussex fuera actriz estadounidense, algo que «nubló el juicio» de sus familiares cuando la presentó a sus seres queridos.
En ese sentido, Meghan reconoce que el que ella fuese actriz «fue el mayor problema».
Entre otras cosas, la duquesa habla de la importancia de proteger a sus hijos -Archie y Lilibet-, de quienes dice son parte de una «familia realmente histórica».
El palacio de Buckingham, residencia de la familia real británica, no se ha pronunciado sobre este documental.