La donación voluntaria de sangre en Venezuela, en los actuales momentos, ha disminuido del 5% al 1%, lo cual significa que de cada 100 personas que donan su sangre, solo una es un donante voluntario, (aquel que acude a dar su sangre de manera altruista para quien la pueda necesitar).
Donar sangre no engorda, no rebaja, y tampoco debilita la salud, ni baja las defensas, al contrario, tiene múltiples beneficios, tanto físicos como psicológicos y sociales. Entre los fisiológicos se cuenta que equilibra los niveles de hierro en el organismo, mejora el flujo sanguíneo, protege el corazón, disminuye el riesgo de cáncer y previene el daño hepático, además de que ofrece información sobre la salud del donante. Por otro lado, la donación mejora la autoestima, promueve la tolerancia y el respeto hacia la vida.
El mensaje de este año de la Organización Mundial de la Salud (OMS), para el Día Mundial del Donante de Sangre, que se celebra anualmente el 14 de junio, es «Dona sangre, dona plasma, comparte la vida, compártela frecuentemente».
El principal objetivo de la campaña es, en primer lugar, festejar y dar gracias a las personas que donan sangre y, en segundo lugar, alentar a los demás a hacerse donantes voluntarios y repetidos de sangre y/o plasma, “alentar a las personas con buena salud a donar periódicamente, para transformar la calidad de vida de los pacientes dependientes de transfusiones”, y ayudar a que los países cuenten con un suministro de sangre segura.
La Coordinadora del Banco de Sangre del Grupo Médico Santa Paula (GMSP) y presidente de la Sociedad Venezolana de Hemoterapia, Magister Lía Talavera, afirmó que “actualmente en Venezuela, no hay cultura de donación, siendo esta la causa principal de que en el país haya disminuido el porcentaje de donantes voluntarios del 5% al 1%”.
Añadió que. por ello, “dependemos básicamente de la donación por reposición, que es cuando a un paciente que lo requiere se le coloca la sangre necesaria para salvar su vida, pero luego se le pide a familiares y amigos acudir a donar sangre para reponer lo que se usó, y no dejar el Banco desabastecido, ya que el mismo paciente, u otro, puede necesitar sangre o alguno de sus componentes”.
Acotó que, en este sentido, “la demanda de sangre en Venezuela supera a la oferta en un porcentaje sumamente elevado, lo que dificulta la disponibilidad de sangre segura y eficiente, trayendo como consecuencia que los servicios de sangre enfrenten muchísimas dificultades para conseguir que este suministro de sangre sea eficiente y oportuno, el cual debe ir aunada a la calidad”. Acotó que “la solución es contar con donantes altruistas y voluntario.
Notiespartano/800Noticias