Los esfuerzos de Internet Archive por preservar una copia del patrimonio cultural histórico en la web se han topado con un nuevo problema. Un grupo de discográficas liderado por Universal Music Group y Sony Music Entertainment han demandado a la organización sin fines de lucro por supuestamente violar sus derechos de autor al digitalizar discos antiguos en su proyecto The Great 78.
La demanda no solo le apunta a Internet Archive. También va contra Brewster Kahle, su fundador, y la empresa George Blood LP, que se dedica a la digitalización de grabaciones antiguas de audio y vídeo. Las disqueras aseguran que los acusados están llevando a cabo una «masiva violación de sus derechos» sobre discos grabados antes del año 1972.
De acuerdo con Sony y Universal, los responsables de The Great 78 reprodujeron miles de canciones desde medios físicos —discos de 78 RPM, en este caso—, para convertirlos en archivos digitales. Una tarea que, afirman, se realizó sin su consentimiento. Pero la historia no termina allí.
Las discográficas sostienen que Internet Archive «deliberadamente subió, distribuyó y transmitió digitalmente» las grabaciones en cuestión a través de su web, permitiendo su acceso de forma ilegal a millones de personas. Básicamente, entonces, los pesos pesados de la industria de la música están acusando a la biblioteca digital de piratería.
Los demandantes reclaman una compensación económica por daños, por hasta 150.000 dólares por cada canción digitalizada por Internet Archive. Considerando que, según las compañías, el proyecto violó la propiedad intelectual de más de 2.700 de sus grabaciones, se estima que el monto podría superar los 400 millones de dólares. Además, solicitan que se elimine todo el material disponible en la web.