Un delfín enojado alertó a los bañistas de la región japonesa de Fukui, después de que el animal fuera acusado de morder por lo menos a 10 nadadores, según informaron las autoridades, quienes instaron a los visitantes a “observar desde lejos” y “no acercarse”.
“Los delfines tienden a ser considerados lindos, pero si te acercas a los delfines salvajes sin cuidado, podrías ser mordido y lesionado”, advirtió la policía de la prefectura de Fukui en una publicación de Twitter el lunes.
Un funcionario local dijo a la agencia de noticias AFP que se llamó al departamento de bomberos de Fukui por dos incidentes, ambos con hombres de unos 40 años que nadaban cerca de la playa local. Pero, según medios locales, se han registrado al menos 10 incidentes relacionados con mordeduras de delfines desde que abrió oficialmente para el verano el 9 de julio.
Las autoridades creen que la serie de ataques es obra de un solo delfín, que fue visto por primera vez cerca de la costa en una playa diferente en abril, dijo a la AFP Masaki Yasui, funcionario del departamento de promoción turística.
Si bien, las lesiones provocadas por el delfín enojado han sido leves hasta el momento, las autoridades locales han advertido sobre “heridas potencialmente graves”. Por ello, colocaron carteles advirtiendo a los fanáticos de los delfines que no toquen al animal e instalaron este miércoles un dispositivo que emite frecuencias ultrasónicas en un intento por repeler a la criatura cascarrabias.
“Entendemos que hay ciertas partes del cuerpo donde a los delfines no les gusta que los toquen, como la punta de la nariz y la aleta trasera”, dijo Yasui, en referencia a una serie de videos publicados en redes sociales donde se mostraba que los bañistas habían estado tratando de tocar al delfín en esas áreas.