Aunque suene un poco curioso, muchas personas consiguen elevar el nivel de excitación de sus parejas al incorporar cosquillas en el sexo. De hecho, se ha convertido en una técnica erótica muy popular, pues es ideal para lograr una mejor estimulación de los sentidos.
Por supuesto, el que brinden placer o no depende de las preferencias de cada uno; además, hay que tener en cuenta el límite entre unas cosquillas placenteras y las que se vuelven dolorosas o insoportables. ¿Cómo aprovechar entonces la sensación que producen?
Es importante aprender a hacer una buena combinación entre cosquillas, caricias y masajes eróticos. Asimismo, es bueno romper la rutina para emplear esos elementos de diferentes texturas que también causan cosquilleos deliciosos. Te contamos en detalle cómo disfrutar esta práctica.
¿Por qué las cosquillas en el sexo pueden aumentar el placer?
El cosquilleo siempre ha sido un juego divertido para las parejas. No solo aumenta la sensación de bienestar entre ambos, sino que despierta los sentidos y puede conducir a experiencias eróticas cargadas de placer y diversión.
La práctica sexual que sugiere añadir cosquillas en el sexo se conoce como tickling. A pesar que para muchos es desconocida, es una técnica que se ha utilizado desde la antigüedad como aliada para aumentar la excitación y potenciar los orgasmos.
Pero más allá de lo que se percibe en la intimidad, estos efectos tienen una justificación científica. Las cosquillas producen risa y, a su vez, aumentan la segregación de endorfinas, más conocidas como “hormonas de la felicidad”.
Las endorfinas estimulan áreas del cerebro que se asocian con el goce y el deseo, lo cual es clave para disfrutar con plenitud el sexo. Por eso, tenerlo en cuenta durante los juegos previos puede ser una forma interesante de alcanzar un clímax intenso.
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Consejos para disfrutar los efectos de las cosquillas en el sexo
El tickling es una práctica sexual sin límites que se puede ejecutar de múltiples maneras. Sin embargo, lo idóneo es moderar el ritmo de las cosquillas, pues en exceso pueden ser molestas o poco estimulantes. ¿Cómo es mejor añadir cosquillas en el sexo? Descubre varios consejos.
Plumas
En la actualidad, casi todas las sex shop ofrecen plumas de diferentes tamaños, ya que son el elemento perfecto para incorporar cosquillas en el sexo. Debido a su textura suave, ofrecen una estimulación sobre las zonas erógenas más sensibles: clítoris, espalda, pene, senos, etc.
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Yema de los dedos
Los dedos son los que más se utilizan a la hora de hacer cosquillas. Pero si se desea lograr una estimulación erótica, las yemas de los dedos deben rozar el cuerpo con delicadeza, produciendo un cosquilleo suave y excitante.
Lengua
Todos sabemos que la lengua es una de las mejores aliadas para estimular cualquier parte erótica del cuerpo de la pareja. Por eso, no es para nada extraño que se recomienden para elevar el placer añadiendo cosquillas en el sexo.
Cabello
Brindar caricias con el cabello puede ayudar a tener una experiencia erótica cargada de placer, risa y sensaciones. El cabello, tal y como ocurre con las plumas, roza de forma delicada las zonas erógenas y brinda una estimulación sobre sus terminaciones nerviosas.
Lubricantes íntimos
Hay muchos tipos de lubricantes íntimos que permiten una mejor estimulación durante los juegos preliminares. Uno de los más novedosos se conoce como “lubricante con sensación de cosquilleo y hormigueo”, cuya aplicación despierta sensaciones intensas.
Este producto sugiere añadir un plus de goce a las relaciones sexuales para acabar con la monotonía. Por eso, gracias a sus componentes, añade cosquillas en el sexo para incrementar la sensación de bienestar y placer.
Cepillo de cerdas suaves
Un cepillo para peinar con cerdas suaves puede ser un buen complemento para estimular las zonas sensibles del cuerpo. Este elemento se puede rozar en áreas como la espalda, el interior de los muslos, los pechos y otras zonas cuyas terminaciones nerviosas elevan la excitación.
Gracias a la textura que lo caracteriza, ayuda a disfrutar las cosquillas en el sexo con sensaciones muy agradables. Cabe aclarar, por supuesto, que se debe frotar con cuidado, de tal modo que detone un cosquilleo suave sin agredir la piel.
Consejo final…
Para tener un encuentro más apasionado y excitante, vale la pena complementar las cosquillas con otros juegos preliminares. Por ejemplo, se pueden vendar los ojos o atar las muñecas para que la pareja se centre en las sensaciones de esta estimulación.
¿Te animas a tener esta experiencia? Recuerda que la estimulación previa al coito tiene muchos beneficios para una vida sexual más placentera. Ahora que sabes cómo disfrutar las cosquillas en el sexo, no dejes de usarlas para despertar más sensaciones en tu pareja.