Este jueves el diario El Colombiano hizo público un estudio donde se afirma y confirma que que en Medellín y Antioquia muchos adictos a la cocaína están llegando a la muerte y esta cifra es casi tres veces superior a la tasa mundial.
Así lo determinó el Hospital San Vicente Fundación en una investigación realizada en pacientes que llegaron a consulta de urgencias de alta complejidad intoxicados por el alto consumo del alucinógeno.
El estudio también confirmó que las afectaciones a los consumidores no se producen solo a nivel de la mente y el cerebro sino también sobre el cuerpo, con compromisos para órganos como los riñones, el hígado, el corazón y el sistema nervioso central.
Si los pacientes viven en condición de pobreza las consecuencias son peores, porque hay más poca posibilidad de intervenir e iniciar tratamientos de desintoxicación a tiempo.
El hallazgo más preocupante para los investigadores, sin embargo, fue la tasa de mortalidad detectada entre los pacientes, ya que está en un nivel de prevalencia del 3,8%, en contraste con la mundial, que según los investigadores es del 1%, advirtió Juliana Quintero Aguirre, toxicóloga de la clínica e integrante del equipo investigador.
Esta mayor prevalencia, la doctora Quintero y su equipo la atribuyen a factores como la facilidad de adquirir cocaína por el bajo precio que tiene a nivel local, la alta potencia de la misma en el país y las mezclas que se hacen para lograr mayores efectos entre los consumidores.
“Acá la cocaína la hacen más potente y la mezclan con cafeína, con medicamentos anestésicos y hasta de uso veterinario”, expone la profesional de la salud.
Resaltó que adquirirla es fácil, al punto que en Medellín existe un turismo asociado al consumo de estupefacientes, lo que eleva el número de consumidores.
Otros agravantes
Adicional a lo anterior, gran cantidad de los pacientes que consultan tiene además un bajo nivel educativo y una condición de pobreza que limita su acceso a la salud, lo que hace que cuando acudan a buscar ayuda ya sus afectaciones están mucho más avanzadas y agravadas, lo que desencadena consecuencias mayores, como la muerte.
“Estas personas no tienen recursos para iniciar un proceso de desintoxicación, cuyos costos generalmente son altos, y llegan más enfermas a consulta”, advierte la profesional Quintero, vocera del hospital para esta investigación.
Este estudio se suma a una investigación del Ministerio de Justicia realizada en Colombia en el periodo 2013 – 2020 y recientemente divulgada, en la cual se identificaron 28.541 defunciones asociadas a consumo de drogas, “teniendo en cuenta que (las víctimas) presentaron resultados positivos de toxicología asociados a sustancias psicoactivas; las principales sustancias encontradas fueron alcohol, cocaína y marihuana, aunque también se hallaron 37 casos asociados a morfina y 19 a tramadol”, dice el informe.
La investigación identificó, también, cinco muertes asociadas al consumo de fentanilo, una sustancia de la que no se tenía referencia conocida de mortalidad en Colombia, pero que en Estados Unidos y Canadá causa actualmente miles de muertes (ver gráfico sobre tipo de consumo).
Lo grave de la situación es que la mortalidad por causa de las drogas, estableció el Ministerio de Justicia, es que más allá de los propios consumidores, hay terceros que reciben el impacto. Según las conclusiones, diversos estudios locales e internacionales refieren relación entre los accidentes de tránsito, así como la comisión de delitos y el consumo de sustancias psicoactivas, lo cual hace relevante realizar pruebas toxicológicas para identificar en cada una de las víctimas que ingresan al Instituto de Medicina Legal.
Notiespartano/ElUniversal