El agua es una sustancia fundamental para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo por lo que beberla regularmente es de gran importancia para el ser humano.
Ingerirla nos permite una buena hidratación celular, perdida de peso corporal, evitar enfermedades cardiovasculares, cáncer y Alzhéimer. Pero no solo es beneficiosa para la parte interna de nuestro cuerpo, también se verá reflejado de forma positiva en el órgano más grande de nuestro cuerpo: la piel.
Debemos tomas de 1.5 a 2.5 litros de agua al día, para mantener una buena hidratación, funciones físicas y cognitivas, así como para regular la temperatura corporal.
Pero ¿qué pasa con nuestra piel si no tomamos la suficiente cantidad de agua que nuestro cuerpo necesita? Aquí te lo contamos.
Beneficios del agua para la piel
Arrugas y perdida de elasticidad: al resecarse la piel, las arrugas y marcas de expresión serán más visibles. Con la edad producimos menos cantidad de colágeno, por lo que ayudar consumiendo agua para mantener la piel debidamente hidratada, favorecerá tener una piel tersa y firme. Y lo mejor de todo, libre de líneas de expresión
Acné: aunque esto es más probable en edades tempranas, en la tercera edad también puede ocurrir. Al tomar suficiente agua, las toxinas serán eliminadas por la orina. Esto permitirá que los poros se mantengan limpios y sin impurezas. Recordemos que estos son los causantes de los puntos negros en el rostro.
Bolsas en los ojos: al tener una piel reseca, se pondrá más fina, lo que ocasionará que las bolsitas en los ojos sean mas visibles.
Manchas: el sol nos pasa factura a través de los años, dejándonos manchas en la piel, pero el tener una piel debidamente hidratada, es menos factible que aparezca la hiperpigmentación. Causante de las terribles manchas.
Piel roja e irritada: esta es una condición típica de las pieles resecas.