Una tigresa de apenas cuatro meses, bautizada como ‘Asha’, se recupera de una frágil situación de salud tras ser encontrada el lunes en una vivienda abandonada misteriosamente en las afueras de la Ciudad de Guatemala, sin que se conozca el origen de la hembra o el de sus captores.
«La bautizamos como ‘Asha’ porque en idioma hindi significa esperanza y además el origen de esta especie es de India», contó a EFE el veterinario Edy Meoño, quien está a cargo de la tigresa rescatada, un animal inquieto que corre y juega con todo lo que encuentra en la clínica.
‘Asha’ fue encontrada el pasado 27 de mayo en una vivienda del municipio de Villa Nueva, 20 kilómetros al sur de la capital del país, según el Ministerio Público (Fiscalía) de Guatemala.
La tigresa fue localizada gracias a que los vecinos de la propiedad donde se encontraba se percataron de su presencia y decidieron denunciar el caso, de acuerdo con la Policía Nacional Civil.
Hasta el momento aún no han sido identificados los captores del felino, que estaba encerrado en una terraza con más de dos días sin alimento, y cuyo origen también es desconocido.
«La cachorra venía en una condición crítica porque venía deshidratada y baja de peso», explicó Meoño, quien durante 30 años se ha especializado en la atención médica de fauna silvestre.
El veterinario a su cargo explica que la tigresa llegó con un peso de nueve kilogramos, cuando lo ideal a su edad es que ronde los 15 kilogramos o más. Precisamente no resulta extraño cuando al colocarle un pedazo de pollo en el suelo, ‘Asha’ lo devora en minutos.
El pelaje de la tigresa aún luce descolorido por la deshidratación y mala alimentación que sufrió. Incluso, sus costillas resaltan en el costado de su cuerpo, pero Meoño es optimista y resalta que se encuentra fuera de peligro.
Además, ‘Asha’ tiene una edad clave porque es a los cuatro meses cuando el mamífero deja de ser amamantado para ser introducido a una dieta cárnica. «Estamos alternando leche con carne de pollo, así como vísceras y huesos», puntualizó Meoño.
Un destino incierto
«La tigresa seguirá en la clínica, máximo una semana más, en lo que gana más peso, y luego será trasladada a un santuario donde tendrá más espacio de forma provisional», agregó el veterinario.
El santuario donde será ubicada la tigresa, temporalmente, se ubica en la costa sur de Guatemala, específicamente en un parque para animales denominado ‘Autosafari Chapín’.
«En un mundo ideal ‘Asha’ sería repatriada a su hábitat natural, que ya sabemos que está en Asia, porque en el país no existe un espacio natural donde pueda ser liberada», concluyó Meoño.
A principios de mayo, Guatemala firmó un memorándum con India para aplicar las técnicas de protección del tigre de bengala en los jaguares y según el Consejo Nacional de Áreas Protegidas, este convenio será aprovechado para buscar que la tigresa rescatada sea retornada eventualmente al país asiático.
‘Asha’ es el tercer tigre de bengala rescatado en Guatemala en los últimos cinco años y usualmente su presencia en el país está relacionada al tráfico ilegal de especies silvestres.
En los últimos años, organizaciones civiles dedicadas a la fauna han reportado el rescate de más de 1.300 especies entre aves, reptiles y mamíferos víctimas de tráfico ilegal.
Notiespartano/800Noticias